EL RESTAURANTE PARA REPETIR CADA TRES POR CUATRO
Si bien hace algunos años lo de ir al mercado era territorio de marujas, parados y público de lo más demodé, en estos tiempos que corren no hay nada más trendy que acudir al mercado del barrio de toda la vida a degustar una oferta gastronómica y sentarse a comer, nunca mejor dicho, producto de mercado, porque bien es cierto que más fresco, no lo hay.
Algunos como el Mercado de Vallehermoso, el Mercado de San Antón el Mercado de Antón Martín llevan algunos años dando mucho que hablar entre los gastrónomos madrileños, pero sin duda, quien dio el pistoletazo de salida en la capital fue el Mercado de San Miguel, que hoy en día se ha convertido en un reclamo más turístico, diría yo, que gastronómico.
En esta ocasión te vengo a hablar de Tres por Cuatro, un pequeño y discreto local en el Mercado de Torrijos donde se come pero que muy bien, y a un precio de lo más accesible. Detrás del proyecto está Álex Marugán, un joven cocinero que con 25 años, un delantal por delante y un derroche de ilusión por detrás, que se lanza en solitario con la humildad y el buen hacer que le caracterizan con un pequeño puesto de grandes propuestas, todas ellas caseras, elaboradas con mucho tiempo, largos tiempos de cocción y dedicación.
Tras ejercer como jefe de cocina en uno de los restaurantes fusión más reclamados de la ciudad como es Barra M, junto a Omar Malpartida, ha decidido apostar por el recetario tradicional con algunos toques personales. Una cocina de su propio mercado que le ha visto nacer, qy ue da vida a una breve carta que se renueva constantemente según la temporada (de aquí lo de 3 por 4 ;)).

Un espacio mínimo, con apenas cuatro mesas dentro, y otras tantas saliendo del puesto, se llenan todos los días para probar la cocina de autor que ofrece Álex . La única pretensión es hacer que el comensal se sienta como en casa, por eso nada es ostentoso sino todo lo contrario, imitando una cocina de casa de lo más tradicional.

Ya los torreznos marcan las expectativas que se espera del resto de la carta de Tres por Cuatro, ajustada a la cocina de siempre.

Más allá de sus contundentes bravas con panceta acompañadas con una salsa bien picantona, los guisos de horas y el cariño del producto se siente el propuestas como la purrusalda de bacalao, un sabroso cardo guisado en una carbonara marina de anguila y calamar o los tradicionales callos con su pata y morro, que ya están dando de qué hablar y que posiblemente sean de los mejorcitos de Madrid.

A pesar de llevar sólo un mes y medio abierto, en Tres por Cuatro ya son obligatorios dos comandas: su Berenjena ahumada, con crema de avellana y queso San Simón….
Así como (y quizá única excepción en una carta repletas de recetas tradicionales y de toda la vida) los tacos caseros que recuerdan a los mexicanos de cochinita pibil, aunque aquí la carne es ossobuco y no se emplea la misma salsa.
Y a estos dos, yo le añadiría un tercero, que es su paella de invierno de trigo con muchas verduritas, realmente exquisita para compartir:

Sólo hay dos postres pero son obligatorios si te pasas por aquí. Las peras estofadas al vino tinto y una tarta de queso que te quita el aliento elaborada por la asesora gastronómica Clara P. Villalón y que se acompaña de quesos más fuertes, lo que le da un tocazo único.
¿Estás conmigo con que es un local donde repetir cada «Tres por Cuatro»? Ojo, hay que reservar, que está tope siempre.
Precio medio: 25 euros
Dónde: Mercado de Torrijos: C/ de Hermosilla, 82
Tel.: 687 26 84 32