Sí, y no me he vuelto loca. No os voy a hablar del Circo del Sol ni del Gran Circo Mundial sino de un restaurante. Bueno, un restaurante-circo. Porque el pasado mes de noviembre abrió sus puertas Zoé Inusual Club en Juan Bravo (antiguo Keeper), y como ellos mismos s definen son “el primer circo gourmet del mundo”.

Un nuevo espacio que recrea el ambiente de los antiguos circos parisinos con música en vivo y espectáculos al mismo tiempo que se disfruta de cocina fusión.

En los fogones y detrás de una auténtica pecera d peces que separa la cocina, el gallego Pucho Landin como principal protagonista. Curtido en DiverXO y StreetXO, el joven se ha lanzado a dirigir un equipo y poner en práctica todo lo aprendido.

Así, propone una carta fuera de lo común, que sorprende con platos bañados de mucho ingrediente asiático y sólo aptos para los comensales menos tradicionales.

Muestra de ello es encontrar por ejemplo, y a modo de entrante, los trigueros salteados con mayonesa de wasabi, acompañados de germinados de ajo y rabanitos picantes:

O esta sartén de huevos rotos, con sabores muy atrevidos,  de atún rojo ahumado y macerado en soja, que además llevan chili encurtido deshidratado en escamas:

Platos que en ningún caso dejan indiferentes, ni al gusto ni a la vista. Otras propuestas, según el chef de las más demandas, son el sándwich de presa ibérica que se macera en fresa durante dos días o la burrata con chutney de tomate verde, que recomiendo probar:

Para los menos aventureros, Zoé Inusual Club también propone platos más clásicos como las croquetas de txangurro, jamón con su pan tumaca o el pulpo a feira con parmentier de patata.

Porque en los principales innova más si cabe, como en la merluza al vapor con pilpil de limón, que compran en Pescaderías Coruñesas, la que acompañan con huevas de caviar de salmón o la caballa a la parrilla con “oloroso” que se acompaña de torreznos de bacalao:

Además, carnes como el solomillo de ternera de Galicia con salsa Oporto y patatas gallegas glaseadas, la hamburguesa de cordero con hummus y chips de yuca y plátano macho o incluso lomo de waygu, otro de los platos más solicitados.

Si queda sitio para los postres, flan de coco con chantilly de yuzu o bomba de chocolate negro con frutos rojos, entre sus propuestas.

Pero además, cuenta con una amplia selección de sushis, que prepara el maestro sushero al momento como estos que probamos y que me encantaron por originales: nigiri de tartar con el arroz bañado en tobico, maki invertido de atún, queso, aguacate y ralladura de lima y coco:

Pero el espectáculo no sólo llega en la mesa, porque cada noche hay un show diferente ameniza la cena con acróbatas circenses, malabaristas, músicos, cantantes o payasos excéntricos.

Y al terminar, Zoé Inusual Club convierte todos sus espacios en discoteca.

El artífice del espacio es el decorador venezolano elegido por muchas celebrities internacionales, Isaac Dospuntos, con una decoración plagada de extravagancias, frases curiosas o rarezas.

Cuenta con proyección en maping como las caras de la entrada, la ventana imaginaria sobre la barra…

Sin duda, un restaurante que no deja indiferente.  Y como bien dicen, no te olvides de pagar al salir…

Precio medio: 35-40 euros. Cuenta con un menú degustación por 55 euros

Dónde: C/Juan Bravo, 31

Tel.: 91 564 38 75

Web: www.zoeinusualclub.net

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