UNA CITA CON EL BRUNCH DE BIBO
Si bien tras el verano os avanzaba que BIBO sería la gran apertura de la temporada en Madrid en uno de mis post sobre COTILLEOS GASTRONÓMIOS (link aquí), resulta paradójico que hasta hoy no haya tenido un momento para, y tras mis sucesivas visitas al restaurante que ya han sido muchas, daros algo de feedback de mi experiencia.
Bien es cierto que la propuesta gastro mucho tiene que ver con su homólogo de Puente Romano en Marbella y del que hará cosa de un año también di buena cuenta en mi post UN FINDE GASTRO EN PUENTE ROMANO (ver link aquí). Pero sin duda merece la pena que dedique unos minutillos a comentaros lo que podréis encontrar en su gemelo madrileño y concretamente, en su brunch del cual no se ha hablado aún tanto, teniendo en cuenta que tenemos el fin de semana a la vuelta de la esquina.
Magnitudes de local aparte, con sus impresionantes 800 m², el globo aerostático, su gigante atún rojo y las 7 mil bombillas con la firma detrás de Lázaro Rosa-Violán rememorando el alumbrado de la feria de Málaga (y añado, que muchos no lo saben, que dispone de un reservado muy chulo para 25 personas), la gastronomía de BIBO respira carácter andaluz por los 4 sentidos, pero, y a su vez, viaja por cocinas foráneas para crear una propuesta tan original como única en Madrid.
Brioches, tapas, sopas frías o ensaladas con producto mediterráneo, entre los que sobresalen el salmorejo de centollo y la burrata con guacamole, edamame y nachos. Asimismo, hay espacio también para las ostras y recetas raw como la flor de lubina o la gamba blanca con vieira; y en contrapartida, para las frituras andaluzas, donde sin duda destacan sus croquetas.
Como resultado, una carta interminable con propuestas para todo tipo de bolsillos, donde sobresalen sus grandes clásicos. Así que toma nota. Que no falte en tu comanda el brioche de rabo de toro, la ensaladilla rusa con huevos fritos de codorniz y la lubina en adobo. Y si surge, alguna de sus burgers con salsa especial, quizá alguna de sus propuestas de la sección especial dedicada al atún, o bien, una de las recetas que trae a Madrid de su restaurante de estrella Michelin con su mismo nombre, como son el gazpacho de cerezas, la tapa de yogur de foie y el milhojas de queso y foie.
Igualmente, su esencia se transmite en su brunch con sello de autor del que se puede disfrutar sábados y domingos de 12 a 14h, y siendo éste uno de los más viajeros y mágicos de la ciudad. Resultado cosmopolita e interesante que afianza esta fórmula importada de comer en nuestra capital, de la que algunos éramos reacios por aquello de tomar primero lo dulce y luego lo salado pero a la cual nos hemos terminado por acostumbrar. Dividido en dos partes (muchos prefieren un desayuno tardío o deciden terminar de comer a lo grande), incluye bollería artesana con mantequilla y mermelada estilo desayuno francés.
Se ofrece su reconocido yogurt de foie con oporto y queso que suscita sentimientos encontrados pero del que soy fan así como fruta osmotizada sobre hielo.
Además, no falta la tosta de tomate con albahaca y un nuevo y divertido Baby Hot Dog.
La segunda parte es de libre elección y se proponen los clásicos huevos benedictine, dos huevos pochados y holandesa glaseada sobre un riquísimo brioche casero y acompañado de bacon a la parrilla. Igualmente, versión de huevo con salmón y huevo a la florentina.
Lo completa un apetitoso bocadillo de roast beef y un espectacular y un tanto picante bocadillo de bogavante con pan pretzel acompañado de patatas fritas recién hechas. ¿Quien quiere más?
¡Este fin de semana tienes una cita!
Precio medio: Brunch entre 29 y 45euros/Carta 45 euros
Dónde: Paseo de la Castellana, 52
Tel.: 91 805 25 56
