Pecaría de osada si a estas alturas de la película y nada menos que en un blog que amaga ser foodie, os viniese a descubrir la vinculación con la gastronomía de la ciudad de San Sebastián. Dicen los que saben, porque yo no había sido aún ni concebida, que en los años 70, a un grupo de cocineros vascos les dio por desarrollar un nuevo estilo culinario basado en la creatividad, el experimento y la investigación. Esta cocina de autor amplió el recetario vasco e incorporó nuevos ingredientes y formas de elaboración ya hoy reconocido allende de los pirineos. Fue entonces cuando la gastronomía se transformó en arte e hizo hoy de San Sebastián meca de gastrónomos y ciudad estrellada con nada menos que 16 estrellas Michelin.

Llegaría, y también, tarde mal y pronto, si me dispusiese a resaltar las virtudes del Hotel María Cristina, a Luxury Collection Hotel. Seña de identidad de la ciudad y considerado no como uno de los mejores de Europa, sino del mundo,  se erige con la elegancia propia de la reina que le da nombre en uno de sus mejores emplazamientos. El edificio, fue construido durante la Belle Époque por el afamado arquitecto francés Charles Mewès hace más de 100 años, allá por julio de 1912. Desde entonces, su imagen de distinción y refinamiento añadida a su estrecha vinculación con el séptimo arte, gracias a su directa relación con el Festival Internacional de Cine, le ha hecho lugar de reunión y de ocio de numerosos artistas, couturiers, empresarios y demás grupos sociales de alta estirpe. Que decir tiene, que de clase, en definitiva, va sobrado.

Bien es cierto que poco acostumbro a recomendaros establecimientos y experiencias más allá de las fronteras de mi querida Comunidad de Madrid, y sólo cuando éstas merecen realmente la pena. No en vano, es misión de periodista lograr sacar la noticia de aquello que aparentemente no lo tiene, y en este caso mucho de desconocido hay, más allá del Café Saigón integrado en el edificio, siendo mi deber descubrírtelo tras mi reciente estancia en tan digno establecimiento del País Vasco, pues es relativo a la pasión que tanto a ti lector, como a mi escritora, nos apasiona: la gastronomía.

Son 5 los descubrimientos gastronómicos que vengo a relataros y que envuelven este majestuoso hospedaje. Algunas frescas y actuales propuestas recién incorporadas, que si bien no vienen a competir con las razones que a todos nos llevan a codiciar dormir bajo tan dignos techos – éstas son su majestuosa arquitectura, espectaculares habitaciones y distinguido servicio -, hacen del hotel un alojamiento aún más refinado si cabe, pero innovador y vanguardista también, lo que ratifica que pocos hoteles quedan ya en el mundo como el Hotel María Cristina de San Sebastián.

1. «LA» TIENDA GOURMET DE SAN SEBASTIÁN

En enero 2014, San Sebastián Food, grupo pionero en ofrecer guías y tours enfocados en las atracciones culinarias del País Vasco, inauguró oficialmente una nueva tienda delicatesen nutrida por una cuidada selección de productos artesanales elegidos con mimo por sus fundadores, tanto dentro del propio País Vasco como del resto de España. Una increíble boutique gourmet a los pies del edificio que propone productos tradicionales pero también una vasta y dinámica oferta de vinos, además de la posibilidad de disfrutar experiencias gastronómicas como didácticas catas.

La nueva boutique delicatessen es considerado ya “EL” sitio para degustar y explorar excelencias gastronómicas de San Sebastián y alrededores, uno de los puntos fuertes de esta elegante ciudad que lo han hecho famosa en el mundo entero.

2. DE VIAJE CON EL PASAPORTE DE PINTXOS

A través de la colaboración con San Sebastián Food, el Hotel Hotel María Cristina propone además a sus clientes y también autóctonos vivir una de las atracciones culinarias más características de San Sebastián como es salir de pintxos. Entre los cientos de bares que plagan la ciudad, un equipo de asesores gastronómico ha seleccionado 10 establecimientos presentes en su Pasaporte Pintxo.

El pack consiste en el pasaporte y 6 monedas para gastar que te permiten disfrutar de seis pintxos diferentes y seis maridajes distintos en los establecimientos que elijas para vivir la aventura gastronómica. Cuando se llega al bar, se enseña el Pasaporte Pintxos al camarero, y éste sirve el pintxo más característico del establecimiento, el cual está detalladamente descrito en el pasaporte, acompañado de una copa de vino. A modo de ejemplo, un pasaporte para 2 personas cuesta 156 euros e incluye además un cóctel en el DRY San Sebastián.

En mi caso, el pasaporte me ayudó a descubrir algunos establecimientos excepcionales de San Sebastián, así como sus pintxos más reconocidos, y que pronto os detallaré en otro post al detalle. ¡Coming soon!

3. EL DRY SAN SEBASTIÁN Y SU FOXTROT

El bar, en colaboración con afamado grupo Dry Martini y su coctelero Javier de las Muelas, es lugar de encuentro para locales y foráneos además de visita obligada para unos y otros. Rinde homenaje al conocido Festival de Cine de San Sebastián y es todo un homenaje al glamour de celebrities que frecuentaron el hotel, como Bette Davis, cuyo retrato reina sobre la pared.

Los cócteles son preparados con amor y transmiten sensaciones, aromas, sabores e incluso emociones. Tuve la ocasión de comprobarlo a través de su camarero Adolfo Raba, todo un experto en los preparados, pero sobretodo, especialista en imprimir cariño, cuidar delicadamente el servicio y disponer todo tipo de detalles, como unos ricos aperitivos o finos chocolates con el café.

Se puede empezar en el Dry Bar tomando un cappuccino por la mañana pero yo me decanto por el afterwork o acabar la noche saboreando un buen combinado y asistiendo al desfile de alguna que otra celebridad. Imprescindible tomar el afamado Jim – Let – Foxtrot, un gin tonic “invertido” que se elabora con un granizado de ginebra y lima y la tónica permanece abajo sin que los hielos se derritan. Delicioso.

4. A PRACTICAR CON LAS CLASES DE COCINA

La propuesta gastronómica del Hotel María Cristina no concluye aquí. Además, junto a San Sebastián Food, el establecimiento propone disfrutar por unas horas de clases de cocina. Un exclusivo servicio que se imparte en un centro culinario de 500 m2 a orillas del hotel y que ofrece la posibilidad de formar parte de un club de degustación.

En su inmensa cocina se puede testimoniar sesiones de show cooking y acoge degustaciones y clases de las diferentes artes culinarias, desde elaboración desde la renombrada cocina vasca o pintxos hasta cócteles, gastronomía molecular.

Cierto es que el turismo gastronómico es blasón de la ciudad, por lo que la propuesta de disfrutar durante la estancia de unas horas de clases de cocina supone un servicio que puede hacer aún más completa la inmersión cultural.

Doy fe de ello, pues tuve ocasión de disfrutar de una maravillosa clase de cocina impartida por el chef Ismael Iglesias, del restaurate Kata4, por cierto, muy recomendable y especializado en ostras. El espacio y puesta en escena, la modernidad de los utensilios de cocina y electrodomésticos y el detalle desde los delantales, materiales explicativos a la degustación final, fue de sobresaliente.

5. DESAYUNO CON DIAMANTES

No podía concluir a este post sin detallaros algo que a todo gastrónomo nos apasiona: los desayunos en grandes hoteles. Servido en el Restaurante Easo, se ofrece en un comedor octogonal bañado en luz natural y está compuesto en forma de buffet libre a base de una exquisita selección de platos orgánicos, internacionales y vascos, que maridan de forma impresionante con las vistas al río Urumea y a la plaza del Teatro Victoria Eugenia.

Es imposible no alargar la mañana con una segunda taza de café mientras contempla la suntuosa decoración de 1912. Sus imponentes columnas rematadas en dorados, yeserías que emulan efigies de la Belle Époque, guirnaldas de delicadas flores, originales candelabros, sobredimensionadas puertas francesas y acceso a las mesas de la terraza que ofrecen vistas superlativas.

En el desayuno, que atrae también a los autóctonos de San Sebastián, se propone toda clase de panes, pasteles y pastas de frutas que se cuecen al horno en el hotel cada mañana. La tentadora selección incluye además fruta fresca, quesos vascos, salmón ahumado, todo tipo de embutidos y platos calientes preparados a la vista por un cooker experto. Además, una amplia variedad de platos fríos, kid’s zone con tortitas o gominolas e incluso para los clientes asiáticos, sopa Congee.

Ahora me dirás, si las 5 propuestas gastronómicas del Hotel María Cristina no lo hacen, si cabe, un establecimiento aún más especial. ¡Amazing!

Dónde: Paseo República Argentina, 4 · San Sebastián

Tel.: 943 437 600

Web: http://www.hotel-mariacristina.com/ // http://www.sansebastianfood.com/es