CHOCOLATE POR ACCIDENTE
Recuerdo aquel juego infantil que organizábamos en mis cumpleaños cuando era pequeña. Se trataba de que todas mis amigas nos poníamos en un círculo en torno a una tableta de chocolate blanco ‘Milkybar’ y se tiraba un dado por orden. Si te salía un 6, tenías que volver a tirarlo, y si te volvía a salir otro 6, era el turno en el menor tiempo posible, ponerte unos guantes, coger un tenedor y un cuchillo e intentar partir el chocolate para comértelo, mientras el resto de niñas seguía tirando el dado hasta que le tocase la siguiente.
Luego llegó el Choconova por navidad. Un juego para hacer figuras de chocolate, con el que atiborré a mi familia de bombones de chocolate Nestlé Extrafino en forma de animales. Pasados unos años, descubrí en viajes a EE.UU. o Inglatera, las impresionantes variedades que tenían con mezclas de todo tipo: crema de cacahuete con chocolate, nube de algodón… pero fue en Suiza donde me quedé impactada con la cultura chocolatera y la calidad de sus producto.
En definitiva, el chocolate siempre ha estado presente en mi vida, y yo creo, que en la de todos, porque siempre ha estado asociado a momentos felices, especiales, a compartir, a disfrutar.

A día de hoy, cuando voy al supermercado, me encanta darme un garbeo, pasearme o simplemente descubrir los nuevos productos que han llegado a los lineales. Es como cuando vas a Zara en temporada, y esperar ver la nueva colección de ropa. Se me pueden ir horas cotilleando etiquetas y mirando composiciones si el supermercado es grande. Me encanta la innovación en el gran consumo. Sin innovación, no hubiese habido por ejemplo, cerveza sin alcohol, yogures desnatados, leche sin lactosa o toallitas desmaquillantes, productos sin los cuales no sabría vivir.
Así que el otro día, de paseo por el supermercado, no pude contenerme a pasar por el pasillo de los chocolates. Había dos variedades nuevas de Nestlé. Me fijé en que había llegado un chocolate negro con arándanos azules, almendras y avellanas de Las Recetas de la Chocolatería, fabricadas en Suiza con cacao de cultivo sostenible y de las cuales soy fan, pero más concretamente en otro nuevo producto que me llamó la atención, El CHOCOLATE BLOND o EL CUARTO CHOCOLATE.

Admiro como también en este mundo del cacao, compañías como Nestlé han sabido reinventarse y adelantarse a las nuevas necesidades que el consumidor está buscando. Porque si pensábamos que ya está todo inventado, el vino blanco, rosado o tinto, la leche normal, semidesnatada o desnatada, o el chocolate con leche, negro y blanco, pues no. La marca, con motivo de sus 150 años de historia (pocas compañías centenarias existen ya y Nestlé es una de ellas) cuenta comercialmente que ha lanzado este cuarto chocolate descubierto “por accidente”, al quedarse olvidado un chocolate blanco al baño María por más tiempo del debido. Este descubrimiento lo hizo un chocolatero, Frederic Bau y luego diferentes casas lo recrearon y comercializaron causando sensación en otros mercados europeos. Y Nestlé, ha querido ahora hacer llegar esta innovación.

Lo cierto es que pasadas unas horas, el chocolate blanco al baño María adquiriere un curioso color dorado. Pero lo que es mejor, el sabor es impresionante, entre caramelo y dulce de leche. Y no me queda otra que felicitar de nuevo a esta empresa por su nuevo producto, y desde este blog, pedirle que por favor siga apostando por la innovación, porque cada día se superan. Y porque a todos nos seguirá seguir disfrutando de momentos especiales y felices en torno a una tableta de chocolate.
Muy interesante el artículo! Estoy deseando probar este chocolate… ñam! 😛
De los suizos han sacado uno blond también!! Con almendras y avellanas. Para mi gusto este es mejor que es blond normal(el de el envoltorio brillante), no se, parece más bueno… a mi me vuelve loca!!
Qué chocolate más malo. Duro como una p**a piedra y encima no es más que chocolate blanco simple. Menuda estafa, no sé como se le puede llamar chocolate a eso.
Dónde puedo encontrar este tipo de chocolate de Nestlé blond en Valencia.
Supongo que en algún gran hipermercado 😉